La clave para sacar unas fotografías espectaculares está en elegir la película (o el carrete) adecuado para cada situación. En este post te cuento todo lo que tienes que saber sobre la película fotográfica y cuándo utilizar cada una de ellas.
La película se puede clasificar según:
1. Formato:
Es la elección más sencilla ya que el formato del carrete viene dado por la cámara.
- 35mm: A pesar de que se creó en 1892 continua siendo el formato más habitual, actualmente se utiliza en cámaras compactas y “single reflex”. Durante el apogeo de la fotografía analógica era el tipo de película más utilizada debido a lo sencillo que era utilizar las cámaras de 135 en comparación con las de medio formato.
Se llama película de 35mm porque los negativos se cortan en tiras que miden 35mm. Proporcionan imágenes rectangulares de 24X36mm.
La película de 35mm se caracteriza por tener unos pequeños agujeros en toda su longitud, y que entre otras cosas, permiten engancharla a la cámara y facilitan el avance de la película en su interior.
Es el formato ideal para los que nos iniciamos en la fotografía analógica, todavía hay mucha disponibilidad de marcas y de variedades, y además, las cámaras son más ligeras e incluso algunas “point and shoot” que permiten disparar sin tener que pensar, solo disfrutar. Otra ventaja es que son bastante más económicos que el resto de formatos, ya que cada carrete tiene o 24 o 36 exposiciones.
- Medio formato: Normalmente lo llamamos 120mm. Fue creado por Eastman Kodak en 1909 y se llama medio formato porque es más grande que el de 135mm y más pequeño que el de gran formato. Nos da imágenes de 56X56mm (son imágenes cuadradas, al contrario que el de 35mm que son rectangulares) y normalmente 12 exposiciones.
Al ser un negativo más grande que el de 35mm proporciona imágenes más nítidas, con mejor capacidad de ampliación al positivarlas y en general (depende un poco de la calidad y de las condiciones de luz) con menor grano.
El negativo de medio formato requiere mayor cuidado una vez lo hayas disparado, a diferencia del negativo de 35mm, el medio formato no va protegido en una carcasa metálica estanca a la luz por eso cuando lo saques de la cámara tienes que hacerlo con mucho cuidado y envolverlo en papel de aluminio hasta que lo reveles.
Otra cosa que debes tener en cuenta una vez hayas disparado tu carrete es no deshacerte del chasis que se queda dentro de la cámara, ya que en muchas ocasiones lo vas a necesitar para volver a utilizarlo, será el chasis donde se va a enrollar el carrete nuevo.
- Gran formato: Se utiliza en cámaras de gran formato y engloba cualquier tamaño mayor que el medio formato, el más habitual es de 4X5 pulgadas y puede llegar hasta 8X10 pulgadas. Las cámaras de gran formato son tan pesadas que es necesario usar trípode y la película (placa) se carga manualmente de hoja en hoja (no existe el carrete propiamente dicho). Por todo esto y aunque la película de gran formato es de muy alta calidad y grandísima nitidez, en la actualidad la utilizan los fotógrafos profesionales.
Alguien que sigue utilizando este tipo de cámaras y película es el actor y fotógrafo analógico Jason Lee, que ha publicado varios libros con series fotográficas hechas durante varios “roadtrips” por Estados Unidos con cámaras de gran formato. En este video puedes verlo en acción.
Sigue atento al blog ya que en breve te voy a contar (y vas a poder ver) cómo ha sido mi primera experiencia con esto de las cámaras de gran formato.
- 127mm: Es un formato poco conocido para los que empezamos con esto de la fotografía analógica pero fue un formato muy utilizado en España en los años 50 y 60, gracias a cámaras como la “Brownie Fiesta” que eran un poco como los iPhone de ahora. El tamaño de este formato está a caballo entre el de 35mm y el de 120mm y proporciona imágenes de 40X40mm o de 40X60. La forma de uso es prácticamente igual a la de la película de 120mm. Aunque parece que es un formato extinto, a día de hoy, la marca Rera sigue fabricándolo y yo acabo de probarlo. En próximos posts te cuento la experiencia.
- 110mm: Un formato casi desconocido y prácticamente olvidado, de no ser porque hace ya varios años Lomography lo rescató del olvido, fabricando sus famosas cámaras fisheye y diana en este formato . Se usa en cámaras muy, muy pequeñas y da fotos de muy pequeño tamaño (13X17mm).
2. Velocidad o sensibilidad (ISO):
Cuando compras un carrete tienes que decidir de qué ISO lo quieres, al tomar esta decisión, lo que estas eligiendo en realidad es cómo de rápido necesitas que reaccione la emulsión a la exposición a la luz.
La escala ISO va desde ISO 50 hasta normalmente ISO 3200. Los valores más bajos son películas fotográficas lentas y los más altos son películas fotográficas rápidas. Es decir, un carrete de ISO 3200 reacciona mucho más rápido a la entrada de luz que otro de 50. Así, con una película de 3200 podremos utilizar una velocidad de obturación más rápida y esto es fundamental en condiciones de poca iluminación. El problema (para algunos, a mí personalmente me encanta) es que normalmente las películas de ISO alta proporcionan imágenes con más grano (aunque el grano también depende de la calidad de cada película).
Los carretes de ISO 400 son todoterreno y van a funcionar bien con prácticamente cualquier condición de iluminación.
Acuérdate de cambiar el valor ISO de la cámara en el momento en el que cargas la película. En general, tiene que coincidir con el valor ISO del carrete, a menos que estés forzándolo (Te cuento qué es forzar un carrete en próximos posts).
3. Por tipo de efecto:
La primera gran división es película negativa o diapositiva. Y dentro de cada uno de los dos grandes bloques tenemos: blanco y negro, color, infrarroja, redscale, etc.
La película negativa proporciona imágenes con los tonos invertidos; si es negativo en blanco y negro, las luces son tonos negros y las sombras tonos blancos. Si es en color, los colores aparecen como los complementarios a los originales.
La película diapositiva nos da imágenes positivas, es decir, no es necesario positivar la imagen para ver el contraste y colores reales.
El proceso de revelado será distinto para cada tipo de película, y cambiarán tanto los químicos como la temperatura, la forma de agitación y los pasos a seguir. En general las diapositivas se revelan mediante un proceso llamado E-6 y los negativos con un proceso C-41.
El proceso cruzado consiste en revelar película mediante un proceso distinto al que requiere normalmente.
Por ejemplo, revelar negativos a color con el proceso E-6 nos da imágenes muy similares a las que obtendríamos si hubiéramos utilizado diapositivas directamente; colores más vivos y saturados pero sin grandes cambios de color. En cambio si revelas, diapositivas con el proceso reservado para negativos a color, obtendrás imágenes muy saturadas, colores muy vivos, bastante grano y en definitiva, unos resultados totalmente inesperados.
Podemos encontrar diapositivas y negativos tanto en blanco y negro como en color.
Tipos más habituales:
- Negativo blanco y negro: nos da imágenes en blanco y negro. El más sencillo para revelar tú mismo en casa y para positivarlo si tienes acceso a ampliadoras fotográficas. Como te conté antes los tienes de distintas ISOs para que elijas en función de las distintas condiciones de luz. Dependiendo del fabricante tendrán mas o menos grano, contraste o calidad.
- Negativo color: Imágenes a todo color. En función de la ISO que tengan van a darnos unos colores más o menos saturados. Por ejemplo ISOs bajas (100) que se utilizan con condiciones de mucha luz nos darán colores muy saturados y vibrantes, mientras que ISOs altas nos darán colores más apagados y más grano. También los distintos fabricantes proporcionan efectos distintos, por ejemplo, el Kodak Portra de ISO 800 es famoso por ser el mejor para captar con mucha naturalidad las distintas tonalidades de piel. Otros como los Fuji son famosos por dar un cierto tono verde a las imágenes. O los Cinestill por captar los colores de forma espectacular en fotos nocturnas.
- Película infrarroja ByN: Es el caso de la Ilford SFX 200. Es sensible sólo al espectro infrarrojo no visible por el ojo humano. Hay que utilizarla con un filtro rojo y está pensada para dar resultados creativos. Por ejemplo, cambiar el color del cielo a negro total o los verdes de la vegetación a blancos. Nos da mejores resultados en condiciones de luz muy brillantes (exteriores o en estudio con luz de tungsteno).
- Película infrarroja color: Al igual que la de blanco y negro, capta la luz infrarroja no visible del espectro rojo y anaranjado, de forma que convierte los colores verdes en gamas de rojos. Es una película muy impredecible pero a veces da resultados espectaculares y muy, muy creativos.
- Película ByN ortocromática: Ha sido recientemente rescatada por Ilford en version 80 ISO. Son películas no sensibles a las tonalidades rojas y anaranjadas. En general tienen mucha nitidez (resolución) y un amplio espectro de grises, lo que las hace perfectas para paisajes.
- Negativo Redscale: produce un efecto que ha estado muy de moda en los últimos años, favorece una tonalidad rojiza que da mucha calidez a las fotos como si hubieran sido disparadas al atardecer.
- Película experimental: Produce efectos inesperados, ideal para desatar tu creatividad. La marca Revolog está especializada en la fabricación de este tipo de películas; desde efectos que simulan reflejos de agua o destellos de colores, pasando por rayos; todo es posible con estos carretes. Otro clásico de la película experimental es la Lomochrome Purple de Lomography que convierte los colores verdes en vibrantes morados y lilas.
- Diapositiva ByN: Hace varios años que dejaron de fabricarse y aunque siempre es triste que dejen de fabricar productos analógicos, se puede simular el efecto de las diapositivas en blanco y negro realizando un proceso cruzado en los negativos blanco y negro. Además, en mi opinion es en color donde la diapositiva realmente merece la pena.
- Diapositiva color: ¡qué decir de las diapositivas a color! solo tienes que ver las fotos de Steve McCurry para enamorarte totalmente de la diapositiva color. Él utilizaba, concretamente, la película Kodachrome, imágenes brillantes, vibrantes y espectacularmente nítidas. Fue descatalogada hace varios años, y durante el último, ha habido muchos rumores sobre su posible vuelta (especialmente después de que Kodak resucitara la Ektachrome). A día de hoy la mejor alternativa es la Velvia de Fuji.
- Película instantanea: Inmediatamente pensamos en las clásicas polaroid, que desaparecieron durante varios años y volvieron a la vida gracias a “The imposible project”. Sin embargo, Fuji también tiene su gama de cámaras y películas instantáneas y a mi personalmente, me encantan.
Hasta aquí el mega post sobre película fotográfica. En próximos post te iré enseñando las pruebas de muchos de estos carretes, cómo los he revelado y qué resultados he obtenido. ¡Sigue atento!